lunes, 24 de febrero de 2020

Fue acaso un sueño de Anna

¿Entonces aquel viaje desde el principio estaba rodeado  de un misterio que al parecer era impenetrable?
¿Pero ella porque cada vez que pensaba en Egipto a pesar de encontrarse en Cáceres sentía ansiedad?
En aquel momento y a pesar de encontrarse en aquella oscuridad en Anna se despertó un interés por saber de dónde le vino esa intuición que sin dudas iba a pasar, porque siempre tuvo en su mente  que algo extraordinario iba a suceder, algo que quizás sería sangriento, tal vez hasta sádico, pero siempre pensó que al fin y al cabo lo que deseaba vivir era una aventura que en su mente deseaba realizar.
Mientras seguían metidos en aquel túnel que parecía no tener salida, ya que aquella aparición de aquel iluminado que parecía ser su salvador, de repente desapareció dejándolos a todos sumidos en la desesperación.
De pronto y en aquel silencio oyeron un rumor, pues al otro lado de donde se encontraban se podían oía las voces de nuevo unos turistas, que parecían comentar algo sobre una extraña pirámide, y en aquellos momentos de zozobra – Anna pensó—que se encontraban en el Valle  de los Reyes, estos turistas parecían encantados pues creyeron oír voces de socorro que salían de dentro de aquella pirámide, pero como todo en aquellas tierras es mágico nadie les hizo caso de aquellas voces, y  estos turistas siguieron su camino.
Pero ninguno de los que pasaban cerca de donde ellos se encontraban  se percató de que en aquella pirámide habían sido sepultados doce personas  que en su vida tuvieron la ilusión de entrar en una de aquella edificaciones, tumbas en la que ni los arqueólogos han podido descubrir ni siquiera aquellos  turistas que creyeron oír sus voces, porque ellos, nunca fueron turistas si no que habían sido visitantes llegados de otro planeta.
Pero Anna en aquel momento en aquel grupo comenzó a  dominarles una histeria colectiva, ella soñaba  con un barco que para ella era el símbolo del viaje  del curso de la vida, que es la nave del alma, el vehículo  por el cual  surcan las aguas de la vida hasta terminar su singladura que anuncia el fin del viaje.
¿Fue Anna una visionaria?
Porque nunca más se supo de los integrantes de ese grupo que había remontado el río Nilo.
Entonces la superficie de aquella pirámide se rompió con un estallido espumeante que les invitabba a salir, a la salida vieron por fin el mundo un mundo que nunca sería el mismo, pues se encontraban cerca del Olimpo de los dioses.
Era eso lo que verdaderamente ansiaba Anna.

    






viernes, 14 de febrero de 2020

porqué tuvo que empezar 2º parte

¿Qué era lo que le había hecho pensar  que cuando llegara a Egipto cambiaría su vida?
Ya no podían seguir navegando, pero tenían que salir de la niebla antes que llegara la noche y los caimanes salieran a cazar, aquella situación parecía sacada de un cuento de terror, pues en unos instantes del río surgió una fuerza inusitada que hizo que la barca navegase a una velocidad de vértigo, bajo la presión de una corriente de agua que los impulsa río arriba hasta ser empujada hacia un túnel, nadie osaba preguntar nada, una tenue luz  salía de una lámpara de gas, que parecía haber surgido para guiarlos, alguien sugiere que debían seguir andando, el suelo se encontraba fangoso, el camino estrecho tanto que Anna toca la pared  con las manos al sentir claustrofobia, entonces descubre  que las paredes se encontraban escritas con jeroglíficos, pero ante tanta oscuridad no puede precisar lo que se encontraba escrito, sólo quería saber dónde se encontraban.
 Un ruido ensordecedor de una corriente fluvial hace temblar a todos al encontrarse sumergidos en la oscuridad, pero siguen caminando todos parecían zombis acatando órdenes, de pronto se encontraron subiendo una pronunciada pendiente, sin dudas era una rampa, alguien tose por el esfuerzo realizado este hecho hace irritar  al que iba en cabeza.
Anna cree que se encuentra  dentro de alguna de las pequeñas pirámides que se encuentran a lo largo del Nilo.
Un foco luminoso deslumbra al cortejo, que al reconocerse en la oscuridad creyeron verse a sí mismos como espectros, siguieron caminando  y al final de aquel pasillo laberíntico pudieron ver a un ser luminoso que parecía esperarles, conforme iban avanzando pudieron oír  voces de obreros  que por el ruido parecían estar trabajando con el cincel en la piedra.
 Entonces Anna pensó que podían encontrarse bajo  una de las tumbas, no habían pasado dos horas  desde que pisó Egipto y reconoció que su mente  y su cuerpo  se habían transformado y, que parecía  estar siguiendo un extraño proceso, mientras tanto iban transcurriendo las horas, entonces recordó que antes de embarcar tuvo una visión increíble, pues se vio sumergida  en un reino oscuro y  subterráneo que se encontraba mezclado con una siniestra hermosura que encarnaba a unas criaturas  nocturnas.
Ante este recuerdo sacude la cabeza, su cara en esos momentos reflejaba una silenciosa palidez sus ojos se tornaron de una mujer demente.
Mientras se preguntaba ¿Entonces esto que estoy viviendo es lo que me ha hecho venir?
¿Acaso en algún momento había desconocido que su único interés por este viaje era solo porque se encontraba relacionado con el esoterismo?
 Que era lo que le había hecho pensar  que al llegar a Egipto podía llegar a ser otra persona?
¿Entonces aquel viaje desde el principio había estado rodeado  de un misterio que al parecer era impenetrable?

¿Pero ella porque cada vez que pensaba en Egipto, sentía ansiedad?



miércoles, 5 de febrero de 2020

Fue acaso un sueño 1º Parte

Anna fue una de esas niñas que cuando iba a visitar a sus abuelos al pueblo de Madroñera, su ilusión era la de subirse a las ramas de los árboles  de la huerta de su abuelo, pues siempre tuvo el sueño de cómo alcanzar las estrellas.
Se hizo mayor, fue al colegio destacando por su aguda inteligencia cuando se trataba de estudiar Astronomía y Arqueología, más tarde destacó por sus estudios de la interpretación de los signos y símbolos egipcios.
En su apartamento puso en un sitio privilegiado una ilustración del llamado Bestiario de Ashmole, se trata de un árbol que muestra un par de criaturas fantásticas, que muerden a unas palomas posadas  en el árbol, este árbol se denomina de la Vida, simbolizando lo universal, la existencia cósmica que nos habla del cielo y lo eterno,  la vida y la muerte.
Ella era así de especial, mientras su destino  era el de esperar, siempre esperar, la verdad es que no sabía el qué. Así transcurrió  su adolescencia sin apenas darse cuenta. Un día y cuando abrió el buzón de correos, se encontró sorprendida al ver una invitación, era para su sorpresa de aquel joven que conoció hacia aproximadamente un año, pero que desde ese mismo instante en que lo vio  fue para ella algo muy especial.
Todo comenzó cuando fueron presentados una noche de verano donde se celebraba en un castillo hotel  una de las bodas más icónicas, pues el enlace era de un magnate americano con una de las actrices más populares del momento, la cual al ser la novia cacereña Anna había sido invitada, por haber sido compañera de colegio, manteniendo desde entonces una amistad entrañable, por lo que aquella invitación tenía para Anna  connotaciones muy especiales, pues el destino quiso que en esa boda encontrara a el hombre que le robó el corazón.
Aquella noche, una vez que tuvo en sus manos la invitación y desde ese momento ya  no pudo dormir, pues en su duermevela, comenzó a tener sueños extraños, enervantes, pero al despertar, como si se tratara de un embrujo su cabeza no parecía afectada por aquellos sueños.
En realidad desde que conoció a aquél hombre, todo comenzó a ser para ella nimio, insignificante, y ante esta ansiedad que sentía despertó en ella un deseo incontrolable de realizar cuanto antes un viaje por Egipto pues más que una ansiedad lo que en verdad la intranquilizaba era una necesidad que no incontrolada.
Enseguida comenzó a planificar lo que sería su viaje, la ropa que iba a necesitar algún folleto que le informara  sobre  lo que estaba  visitando, lo más importante ya que iba a conocer Egipto in situ.
Llegó el tan ansiado día, y el viaje desde Cáceres a Madrid  fue para ella  un viaje donde las incógnitas se mezclaban con la curiosidad.
En el aeropuerto Madrid-Barajas, le indican que tiene que esperar en la sala Bic, hasta ser llamada, pues viajaría en un avión particular  por gentileza del esposo de su amiga.
Una vez dentro de la nave, Anna cuenta más o menos que los que iban a viajar serían contando la tripulación unos doce, el viaje transcurrió como un sueño hecho realidad, para entretenerse Anna jugó una partida de ajedrez muy reñida con una chica colombiana, otros contaron chistes, y todos terminaron contando anécdotas de viajes realizados.
Una vez llegaron a Egipto fueron recogidos por dos automóviles que les llevaron hasta un embarcadero del Nilo, allí les esperaba una embarcación construida en madera y papiro, Anna nada más pisar la embarcación supo que había comenzado la aventura de su vida, y como no quería perderse nada se situó en la proa, y cuando se encontraba contemplando la imagen majestuosa de la pirámide de Guiza, en su contemplación creyó ver una máscara que se interponía entre el monumento y ella, agudiza la vista y sorprendida  reconoció la máscara con la que enterraron al faraón Tutankhamón, le pareció tan extraño que pensó era una sugestión producida por el ambiente, de repente la barca comenzó a zozobrar, su balanceo era tan violento  que parecía iban a volcar.

Anna presiente que algo grave les podía pasar pues la barca se hacía paso entre la niebla como si el papiro con la que estaba construida se estuviera rajando.
 En esa parte del río Nilo no se veía ninguna embarcación, de repente el río es engullido por una densa niebla, la situación era molesta, pero para el barquero  parecía mucho más grave ya que comenzó a dar voces pidiendo ayuda, la situación parecía agravarse, de pronto la barca hace una parada brusca, era como si se hubieran dado un golpe con algo invisible , aquel algo sin dudas pensó Anna podía ser un muro que al  no poder pasar la barca podía ser impenetrable.