domingo, 27 de octubre de 2019

Halloween

INCISO

HALLOWEEN

UNA DE ESAS NOCHES TERRORÍFICAS QUE NO SE OLVIDAN

Has cerrado bien la puerta, pero nadie contestó, Pepa desde la cama pregunta de nuevo ¿Has oído lo que te he dicho?
Sigue el silencio.
Pepa que siempre tuvo el miedo pegado al cuerpo, intenta encender la luz de la mesilla, pero ésta no se enciende, un ruido seco roza la pared del pasillo, silencio, soledad, de repente ve cómo una fugaz sombra entra en la habitación de su amiga Anna.
Pepa entra con precaución en la habitación y, encuentra echada encima de la cama a su amiga que se encuentra vestida de negro, rostro níveo, de donde destacaban  las dos cuencas de los ojos vacías.
Pepa da un grito de terror  cuando nota que los ojos de su amiga se posan en su frente, de un manotazo intenta quitárselos de encima, pero se encuentran pegados con fuerza en su piel.
Abre la puerta del piso y, baja las escaleras gritando, pero cuando llega al portal, vio otra visión más espantosa aún, pues su amigase besaba con su novio.
¿Fue real esta última visión?
O fue una de esas jugarretas que dicen llamarlas. ”Premoniciones”
Una ráfaga de viento le despegó aquellos  ojos de su frente, llevándoselos hacia un lugar donde la claridad no existe.
FELIZ DÍA DEL TERROR.






sábado, 19 de octubre de 2019

Almas en las sombras 1º Parte

Las tres moscas, cada una de ellas se encontraban coronadas por pequeñas gemas de diferentes colores en la cual parecían realzar unas siglas, que para cualquier profano como él, eran totalmente ininteligibles. Después de observarlo durante largo rato  sin conseguir tener nada en claro, sigue sin atreverse a sacarlo de la caja, se enoja consigo mismo al no tener la valentía necesaria para llegar a una solución.
 Después de cerrar la caja, piensa que era totalmente contradictoria, pues la madera no parecía pertenecer a ninguna especie arbórea conocida y, a pesar de desconocer su procedencia, la caja de diseño corriente no tenía visos de que hubiera sido un primitivo estuche.
Eladio se quedó por unos momentos pensativo, y de repente creyó ver la luz y, todo en su mente  fue tan rápido que decidió, que esa investigación se le podía haber presentado como un reto, que tal vez le catapultara a realizar  un nuevo trabajo mejor remunerado, y por supuesto mucho mejor que el de perseguir a criminales que a veces y después de una urda investigación llegaba al resultado de que eran historias inventadas o bulos tan rocambolescas que algunos creía podían llegar a ridiculizar su trabajo. Esta nueva etapa que veía Eladio en su vida se la imaginaba brillante, pues creía ser merecedor  después de haber pasado  tantas penurias.
 ¿sería que le había tocado la mano de Dios?  Aunque sabía de antemano que todo parecía presagiar que  había trazos de ser difícil de resolver.
Eladio, le da mil vueltas a la cabeza con respecto a la caja que tenía en las manos pues esta  podía llegar a ser la clave, porque desde el primer momento que la observó  tuvo la sospecha de que ese desfase que se apreciaba en la conservación de la caja, no encajaba con la antigüedad de la joya, este detalle fue el que hizo que se alertara de que esta joya pudiera estar involucrada en algún robo importante, o, tal vez en alguna trama que podía desembocar en un asunto turbio.
El detective ante esta incógnita, hace una llamada telefónica. Cuelga satisfecho, poco después, Matilde, entra en la calle, una calle que le pareció no tenía principio ni fin y, después de mucho buscar buscar encontró el edificio donde  había sido  citada con su amigo; el edificio era antiguo con una fachada áspera, erosionada por falta de atención y cuidados, entra en el portal, ante ella un ascensor de jaula el cual se encontraba abrazado por unas claustrofobicas escaleras, desde donde se podía apreciar una vez dentro, que en el ascenso o descenso—según se mire—se podía apreciar la desolada agonía del edificio en el cual trabajaba su amigo.
Llama a la puerta, Eladio la recibe con una sonrisa de agradecimiento, pasa, espero me puedas ayudar, pues tengo un encargo que supone para mí un enigma, y necesito que me ayudes a resolver, pues sé que siempre te interesaron las antigüedades.
Matilde es una de esas jóvenes modernas  y con un atractivo especial al poseer una abundante melena de color del cobre, en esos momentos vestía una falda exageradamente corta, jerséis ajustado que realzaba su busto, unas botas altas hasta taparle medio muslo, consiguiendo con este atuendo que fuera aún más llamativa.
Matilde con la simpatía que siempre la caracterizó, con desenvoltura, se acercó a la mesa, ¿Dónde está ese tesoro?, el detective le muestra la caja, Matilde, la abre con desenvoltura y, nada más ver la joya, sin haberla tocado, y sin tener conciencia de ello articuló unas palabras que al salir de su boca tronó cómo si fuera  una voz extraña que ella desconocía; confusa buscó una silla para sentarse, cuando se serenó.
Mirando a Eladio con voz preocupada pudo decirle, siento comunicarte que en este caso no voy a poder ayudarte, no me veo con el suficiente conocimiento cómo para desvelar de que siglo puede ser esta joya, sí que puedo decirte que el diseño es único, jamás había visto uno igual, ni tan siquiera es parecido a ninguna de las muchas fotografías que he visto en las revistas especializadas de la antigüedad.

Eladio al verla tan reticente, insiste para que la mirase con el alma, y suplicó sabes de que no puedo llamar a nadie que no sea de mi entera confianza, pues mi trabajo requiere el más absoluto secreto, por favor, no me falles,--llegó hasta implorarle —sólo confío en ti.



martes, 8 de octubre de 2019

Es dura la vida en el campo

 Corre de nuevo sin rumbo, aumentado aún más su desvarío, mientras tanto el día se convertía en noche, en noche cerrada y misteriosa, llega a un arroyo se lava la cara, entonces echa de menos a los pájaros que parecían haber desaparecido del cielo, donde se encontraban, todo era silencio, no sabe qué hacer, se sienta en una peña, y desolada espera, pero no sabía el qué, hasta que de pronto nota que una mano se posa en su hombro, entonces levantó la vista, y vio a una anciana, aquella mujer hizo un gesto levantando su dedo pulgar hacia el cielo, con la intención de que mirara.
 Entonces supo que se estaba produciendo un eclipse de sol.
 Pero eso a Terra no le reconfortó. Poco después, no supo cómo, pero se encontraba de nuevo en su choza,  se sienta en su taburete y cuando se dispuso a comerse unas algarrobas, apareció ante ella un hombre, alto y delgado que lucía una larga melena que le cubría parte de su rostro, era un rostro pálido y ojeroso, que a Terra le pareció un animal depredador que guardaba oscuros secretos.
No supo cómo pero enseguida se durmió, y en sus sueños  solo pensaba que en algún sitio de la tierra se estaría festejando una fiesta, en sus sueños recordó una foto que casualmente se encontró dónde dos seres humanos parecidos a ella se mostraban abrazados. Mientras dormía creyó sentir en su cabeza susurros, y emociones que no supo concretar.
Aquella aparición de aquel hombre, que al saber que sus tentaciones no serían cumplidas desapareció, dando paso a el día con una luz cegadora.
Pero ella ignoraba que era una adolescente con sueños he ilusiones, y que a pesar de  encontrarse  sola en el campo, en su subconsciente  añoraba algo pero no sabía el qué.
Pero de nuevo salió con un nuevo día el sol, que supo iluminar su tortuoso camino de los sueños.
Poco después y al despertar de su ensoñación, ya nada tenía importancia para ella, pues sabía que se había inventado una historia solo para ella misma, narrándose así misma cosas que para cualquiera le hubieran parecido extrañas. Pues  todo ocurrió mientras era  abrazada por su fiel Tom. Una vez que se vio bajo el techo de un cielo azul, supo que el eclipse de sol había sido el culpable de que  su imaginación, le dijera  que no era buena la soledad.
Esta historia que se inventó Terra, tuvo consecuencias para ella, pues después de analizar aquellas fantasías, supo sin dudas que aquel día iba a ser especial, porque tenía entendido  que cuando la imaginación es ilimitada puede llegar a conseguirse todo, pero, como en ella estaban siendo fantasías  reiteradas, tuvo la impresión de que tenían como finalidad algo que su subconsciente  anhelaba desde lo más profundo de su ser.
 Un desenlace feliz.
Entonces y en  el silencio del campo se oyó un silbido, para Terra este silbido hizo que palpitara su corazón, de repente, supo que habían desaparecido junto con la oscuridad que produjo el eclipse todas sus fantasías irrealizables  de adolescente, ahora le esperaba vivir  una realidad.
Había aparecido ante ella un joven que dijo llamarse  Marcos, que con cortesía la estaba invitando a la fiesta del pueblo.
¿Cómo supo Marcos donde se encontraba Terra?
¿Y cómo se dirigió a ella como si la hubiera conocido de siempre?
 Mientras tanto una suave brisa parecía mecerlos.
Una voz dentro de su interior le decía, conviértete en lo que siempre deseaste, no pierdas la oportunidad, pues con tu imaginación has creado un mundo perfecto para ti, aprovéchalo, esta es la única realidad.
El eclipse hizo de intermediario, haciéndole el regalo de la felicidad añorada.

Siempre después de la oscuridad, nace la luz.
 FINAL